La aerolínea alemana Lufthansa cumplió sus objetivos para mejorar la eficiencia y el uso de combustible gracias a la adquisición de nueva flota, dijo en entrevista con T21 Sebastian Sapiain, coordinador de Comunicación en Latinoamérica de Grupo Lufthansa.
De este modo, la firma aérea logró este año disminuir de 4.1 litros de queroseno por cada 100 kilómetros y pasajero a 3.9 litros, señaló el directivo.
“Con el nuevo equipo la idea es seguir reduciendo mucho más (el consumo de combustible) y así ayudar a la sustentabilidad del planeta”, expresó.
Sapiain explicó que con el Boeing 747-8, este año la compañía adicionará cuatro a su flota, se reduce 30% el combustible utilizado por los actuales B747-400 de los que dispone la aerolínea.
Asimismo, estos aviones emiten 15% menos de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera y disminuyen el nivel de ruido en igual porcentaje, señaló el coordinador de Comunicación.
Con ello y la entrada en funcionamiento de otros modelos como el Airbus A320 Neo y el A350-900, previstos para 2016, y los B777 a mediano plazo, la firma alemana espera reducir el índice de litros de queroseno.
A esta meta, hay que sumar el uso de biocombustible en algunos vuelos, como la ruta Oslo-Frankfurt, que se espera pueda llevarse a cabo con turbosina de origen vegetal a partir de 2016 en todos los vuelos que Grupo Lufthansa –conformado por Swiss y Brussel Airlines, entre otras- ofrece.
Según datos de la compañía, en 2015 incorporará dos Airbus A380, cuatro Boeing 747-8, un B 777F –de carga- y diez A320, de un conjunto de pedidos de 260 aviones con un precio en lista de 30 mil millones de euros.
Fuente: t21