Justicia Ciudadana un proyecto de responsabilidad social para las víctimas de la justicia: No es una novedad mencionar que el país enfrenta grandes retos en términos de seguridad. De hecho, el 75.9% de la población considera que su ciudad es insegura, según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU). El panorama exige no solo medidas desde el ámbito público, sino también iniciativas desde el sector privado que permitan a las empresas contribuir como actores vivos de la comunidad.
Justicia Ciudadana un proyecto de responsabilidad social para las víctimas de la justicia
No es necesario centrarse en las diversas cifras que circulan en materia de delincuencia y eficiencia de la justicia. Existen dos frentes a los que, como individuos, no prestamos la atención suficiente. Por un lado, está la reinserción de los mexicanos que recuperan su libertad después de cumplir con su condena. Por otro lado, las personas que fueron encarceladas injustamente. Para la sociedad en general, son realidades demasiado lejanas. Esto provoca que los proyectos que podrían generar un impacto no cuenten con el suficiente apoyo para desarrollarse.
La reconciliación es un elemento determinante para que iniciativas de “segundas oportunidades” sean exitosas y garanticen la prevención de la reincidencia en conductas delictivas. La respuesta está en ofrecer nuevas opciones por medio de proyectos estructurados, que garanticen control y cumplimiento. Por ejemplo, en la Ciudad de México existe el Instituto de Reinserción Social para egresados de centros penitenciarios, con diversas áreas de atención con servicios laborales, escolares y médicos, que ha arrojado resultados positivos en la materia.
Cada vez más son más las organizaciones que se han sumado a iniciativas en favor de la reintegración de la población carcelaria, sin embargo, la sociedad todavía expresa cierto grado de escepticismo hacia estos temas. Por otro lado, según estudios de Open Society Institute, aproximadamente el 40% de las personas encarceladas en el país “son legalmente inocentes” o están en prisión por delitos menores a 5,000 pesos. Frente a esta situación surge el cuestionamiento de: ¿Qué mecanismos de ayuda están disponibles para este tipo de situaciones?
Actualmente, existen proyectos e instituciones que representan esperanza para las víctimas de estas fallas o vacíos en la justicia. Por ejemplo, en Puebla, Justicia Ciudadana ha brindado, durante más de 20 años, asesoría jurídica y psicológica gratuita a personas de escasos recursos y grupos vulnerables, con el fin de mejorar los índices de seguridad en la ciudad.
Con un modelo de participación ciudadana, esta asociación promueve la justicia a través de la reparación del daño y penas proporcionales a los delitos cometidos. Con su programa “Víctimas del proceso penal”, Justicia Ciudadana lucha por disminuir el índice de personas internas injustamente en los Centros de Readaptación Social del Estado. La iniciativa busca apoyar a aquellas personas que han sufrido violaciones de sus derechos fundamentales o que han sido encarceladas injustamente.
El programa provee la realización inicial de estudios exhaustivos para determinar que los beneficiarios de este programa no supongan un riesgo para la sociedad y garantizar así su reinserción en la sociedad.
Este tipo de ayuda es posible gracias a la colaboración de entidades tanto privadas como públicas. Es así como muchas empresas se han unido al cometido de Justicia Ciudadana, haciendo posible éste y más programas. Al respecto, Rafael Posada Cueto, presidente de Grupo Proyecta, una de las empresas que actualmente apoya este programa, afirmó que: “Es una responsabilidad de las empresas contribuir con la comunidad para construir un país mejor. Desde el año 2016, hemos colaborado con la causa de Justicia Ciudadana porque creemos en el progreso y crecimiento de México, no solo desde un punto de vista económico, sino también social”.
Sin lugar a duda, aún queda mucho por hacer por las personas internas en México. Iniciativas como estas están comenzando a pavimentar el camino a seguir. La transformación social solo es posible si existe compromiso público y privado, materializado en proyectos que brindan nuevas oportunidades a los mexicanos en condiciones de vulnerabilidad.
Para más información visita https://justiciaciudadanapuebla.org