Nearshoring se vuelve clave para la sostenibilidad en México
- El nearshoring en México impulsa la inversión y sostenibilidad, destacando la colaboración público-privada y el crecimiento en sectores clave como manufactura y energías renovables.
Nearshoring se vuelve clave para la sostenibilidad en México
El Plan México, recientemente anunciado, busca impulsar la industrialización a largo plazo en el país, destacando el nearshoring como una de sus estrategias principales. Este enfoque incluye 2,000 nuevos proyectos que podrían atraer más de 277 mil millones de dólares en inversión extranjera directa (IED), lo que promete un impacto positivo para el sector empresarial.
A pesar de una disminución del 31% en la inversión durante 2024, la iniciativa ha generado expectativas optimistas, con la previsión de un aumento en la demanda y nuevas inversiones. El nearshoring no es un concepto nuevo en México, pero este plan marca un cambio estratégico, con políticas como los Polos de Bienestar y el relanzamiento del distintivo “Hecho en México”, para potenciar el reconocimiento global de los productos nacionales.
Según Adriana Pulido, CEO de ILUNKA, las grandes empresas tendrán un rol crucial en la implementación de este plan, especialmente en términos de sostenibilidad. El nearshoring no solo mejorará las cadenas de producción, sino que también impulsará el desarrollo económico y social del país.
Existen cuatro factores clave que las empresas deben considerar para aprovechar al máximo esta oportunidad:
Mayor competitividad en sectores estratégicos:
La manufactura avanzada, la tecnología, la logística y las energías renovables lideran este cambio. México, con su ubicación estratégica y capacidad manufacturera, se posiciona como un destino ideal para la relocalización. Ejemplos como la inversión de Amazon en un centro de datos en Querétaro, valorada en 5,000 millones de dólares, muestran el potencial de desarrollo e infraestructura.
Impulso de empresas verdes:
Las compañías que se centran en energías renovables, manejo eficiente de recursos y economía circular se han convertido en socios estratégicos dentro de las cadenas de valor. México, especialmente en regiones como la Ciudad de México, se está convirtiendo en un punto clave para estas iniciativas, gracias a su creciente ecosistema de innovación sostenible.
Aumento de la inversión extranjera directa (IED):
México sigue atrayendo inversiones importantes, fortaleciendo sus ecosistemas industriales. Regiones como Chihuahua, Baja California Sur y Quintana Roo están captando grandes montos de IED, lo que subraya la importancia de una adecuada gestión de los recursos naturales y una estrategia sólida de sostenibilidad para mantener este crecimiento.
Colaboración público-privada:
Las nuevas regulaciones brindarán mayor claridad y apoyo a las empresas para cumplir con los estándares necesarios para el nearshoring sostenible. Esta colaboración entre el sector público y privado garantizará un crecimiento económico equilibrado que aborde los retos globales de sostenibilidad y las necesidades de las cadenas de suministro internacionales.
El nearshoring ofrece una oportunidad histórica para México, pero también presenta desafíos, como la mejora en infraestructura, capacitación laboral y seguridad jurídica. Sin embargo, representa una transformación significativa que podría posicionar a México como líder regional en sostenibilidad y un socio estratégico en la economía global.
Pulido concluye que este enfoque no es una tendencia pasajera, sino un motor de cambio que reconfigurará el panorama empresarial mexicano en la próxima década.